Por Norte Visión.- Poza Rica enfrenta una creciente violencia e inseguridad desde que comenzó la administración del alcalde Fernando Remes, lo que preocupa a la ciudadanía. Recientemente, se han reportado desapariciones y “levantones”, llevando a un aumento en la crítica hacia el gobierno municipal por su falta de acciones efectivas. Los ciudadanos sienten miedo, y un comerciante mencionó que las autoridades minimizan la situación. Además, el municipio sufre problemas de marginación y desempleo, complicando aún más la vida de las familias. Los nuevos actores políticos no abordan la crisis de seguridad, y expertos indican que la falta de seguridad limita el desarrollo. Los ciudadanos exigen un cambio urgente en la estrategia de seguridad y compromiso de las autoridades.