19 junio, 2025

Por Fernando Inés Carmona

Orizaba, Ver.- La región Altas Montañas enfrenta una creciente crisis tras el bloqueo del relleno sanitario ubicado en el municipio de Nogales, que mantiene paralizados a más de 150 camiones recolectores de basura y causa la acumulación de más de 2 mil toneladas de desechos sólidos, en al menos 50 municipios de la zona, en tan sólo 24 horas.

 El cierre que se ordenó desde la mañana del martes, impide el acceso de las unidades recolectoras de al menos 50 municipios que utilizan este sitio para la disposición final de sus residuos, así lo informó Andrés Morales, coordinador de Limpia Pública del ayuntamiento de Orizaba, quien señaló que el impacto del cierre es inmediato y podría volverse insostenible si no se resuelve con prontitud.  “Estamos en crisis. El bloqueo ha impedido el paso de más de 150 camiones, y en un solo día ya se acumularon más de 2 mil toneladas de basura. Los 50 municipios que dependemos de este relleno estamos completamente paralizados”, alertó Morales.

El relleno sanitario ubicado en la zona centro del estado de Veracruz ha sido durante años el punto de destino de los residuos sólidos urbanos de una extensa región. Municipios como Orizaba, Río Blanco, Ixtaczoquitlán, Nogales, Mendoza, Córdoba, y hasta poblaciones más alejadas como Tezonapa y Coscomatepec, trasladan diariamente sus residuos hasta este sitio.

El cierre actual fue provocado por un grupo de dirigentes de agrupaciones sindicales de camioneros, quienes exigen ser contratados para los trabajos de construcción que ahí se ejecutan. Con los camiones detenidos a las afueras del acceso principal al relleno, los residuos recolectados en colonias, unidades habitacionales y centros urbanos no están siendo procesados ni dispuestos, lo que ha obligado a suspender rutas de recolección en diversos municipios. “Ya no tenemos dónde depositar la basura. En el caso de Orizaba, las unidades están llenas y no pueden continuar las rutas. Es una situación grave porque estamos en temporada de lluvias, y esto puede derivar en brotes de enfermedades, taponamientos de drenajes y un fuerte impacto ambiental”.

Asimismo, y ante los hechos, trascendió que se busca gestionar una solución con los manifestantes, pues la situación no sólo afecta a los municipios, sino a miles de familias que podrían enfrentarse a un problema sanitario si la contingencia se prolonga.

Especialistas en salud pública han advertido que la acumulación de residuos sólidos, especialmente en zonas urbanas densamente pobladas, puede derivar en la proliferación de vectores como ratas, cucarachas y moscas, así como gases y lixiviados que contaminan el aire y los mantos freáticos.

La Secretaría de Salud (SS) estatal, hasta el momento, no ha emitido una alerta específica, pero autoridades municipales han comenzado a fumigar zonas donde la basura empieza a acumularse, como mercados, tianguis y parques públicos.

Los alcaldes de varios municipios afectados han comenzado a reunirse de manera urgente para evaluar alternativas y pedir a las autoridades estatales que intervengan directamente. En Orizaba, el alcalde y su Cabildo ya sostuvieron reuniones con autoridades ambientales para buscar mecanismos de solución.

“La urgencia es inmediata. No podemos esperar varios días. Si hoy no se resuelve, mañana tendremos el doble de basura acumulada. Esta es una bomba sanitaria que debe desactivarse ya”, advirtió Andrés Morales. Mientras tanto, vecinos de diversas colonias comienzan a notar la falta de recolección de basura, y en redes sociales se reportan montones de bolsas acumuladas en esquinas y banquetas, generando molestia y preocupación.