El Clan: los negocios ocultos detrás del Tren Maya
En una investigación de LATINUS.- Una red de tráfico de influencias y contratos millonarios se ha tejido en torno al Tren Maya bajo la sombra de los hijos del ex presidente Andrés Manuel López Obrador. Andy y Gonzalo “Bobby” López Beltrán, piezas centrales de lo que diversas fuentes llaman “El Clan”, habrían facilitado la entrega de miles de metros cúbicos de balasto sin cumplir las certificaciones de calidad necesarias.
El balasto, piedra fundamental para asentar las vías, llegó a la obra con aval de laboratorios que, según testimonios, fueron sobornados para aprobar material que no cumplía con los estándares técnicos.
El papel de Amílcar Olán
El contratista tabasqueño Amílcar Olán, amigo cercano de los López Beltrán, aparece como protagonista de este esquema. Sus empresas se convirtieron en proveedoras privilegiadas de la piedra para el Tren Maya, un negocio que habría sido blindado gracias a sus vínculos personales con la familia presidencial.
Una red que creció
La corrupción permitió colocar material cuestionado en la obra más emblemática del sexenio, lo que abre dudas sobre la seguridad y la durabilidad del proyecto. Pero el Tren Maya no es el punto final. De acuerdo con fuentes consultadas, “El Clan” ya prepara su expansión hacia nuevos contratos en Petróleos Mexicanos, apuntando al sexenio actual.
El caso del balasto confirma lo que especialistas y opositores han denunciado: la fusión entre poder político y negocios privados, un sello que amenaza con extenderse más allá de este gobierno
Otras fuentes de los reportajes de investigación.