Inaceptable.
Como si el derecho al secreto profesional fuera opcional. Una democracia sólida no se construye presionando a la prensa ni intimidando a quienes investigan. El periodismo se respeta. Las fuentes se protegen. Y la libertad de expresión no se negocia. Mi solidaridad con Laura, una gran profesional y valiente, como muchos de las y los periodistas que siguen informando a pesar de las amenazas del régimen —ahora incluso institucionales— que un día los mexicanos defendimos y que hoy, simplemente, dan vergüenza. #NoRevelaréMisFuentes#LibertadDeExpresión#PeriodismoNoEsDelito