Agencia Innova Digital.- “¡Ninguna potencia extranjera decide por nosotros!”. Con voz firme y mirada al frente, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo encabezó este 16 de septiembre el primer Desfile Cívico Militar dirigido por una mujer en la historia del país. A las 9:57 de la mañana, izó la bandera monumental en el Zócalo capitalino, marcando el inicio de una jornada cargada de simbolismo, patriotismo y poder institucional.
La noche anterior, acompañada por su esposo Jesús María Tarriba, miembros del gabinete y los titulares de Marina y Defensa Nacional, la mandataria dio el tradicional Grito de Independencia. Pero fue en su discurso matutino donde lanzó un mensaje contundente ante miles de asistentes:
“¡Ninguna injerencia es posible en nuestra patria!”
Bajo un cielo cambiante —entre nubes densas y ráfagas de sol— desfilaron tropas del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional, rindiendo honores a la primera mujer que ostenta el mando supremo de las Fuerzas Armadas. La bandera tricolor ondeaba majestuosa en el corazón de la capital, mientras México celebraba no solo su independencia, sino también un nuevo capítulo en su historia política.
