El desastre ambiental avanza mientras Pemex intenta contener los daños
Un derrame de hidrocarburo proveniente de un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) ha encendido las alarmas en Veracruz: el contaminante ya alcanzó el río Tuxpan tras afectar gravemente al río Pantepec, poniendo en riesgo ecosistemas acuáticos y comunidades ribereñas.
Pemex informó que ha desplegado dos barreras de contención, cordones oleofílicos y equipos de bombeo y recolección superficial para mitigar el impacto. Sin embargo, la emergencia continúa. Personal especializado trabaja contrarreloj para instalar tres barreras adicionales que refuercen la contención y permitan recuperar el hidrocarburo derramado.
La Dra. Marcela Villegas Silva, directora de Administración y Servicios de Pemex, supervisó personalmente la zona afectada junto a equipos de Logística, asegurando que las labores se realicen bajo protocolos de seguridad y protección ambiental. Aun así, las imágenes difundidas por la propia empresa revelan la magnitud del daño: aguas ennegrecidas, vegetación contaminada y una lucha titánica por evitar que el desastre se agrave.
Este nuevo incidente se suma a una larga lista de preocupaciones ambientales en la región. Mientras las autoridades continúan con las labores de limpieza, la ciudadanía exige respuestas claras y acciones contundentes para evitar que tragedias como esta se repitan.