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Veracruz, ver. — Con palabras cargadas de emoción y gratitud, Jorge Carvallo Delfín, dirigente nacional del Movimiento Nacional Cañero, rindió homenaje a la memoria del exgobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, quien falleció el pasado 2 de mayo. En un acto de reconocimiento público, Carvallo recordó no solo al político, sino al hombre que dejó una huella indeleble en su vida y en la historia política del país.

“Fidel Herrera fue un político visionario que supo interpretar las necesidades del pueblo veracruzano y del país. Su capacidad para unir a sectores diversos y su enfoque en el desarrollo social y económico lo convierten en una figura clave en la historia política contemporánea de México”, expresó Carvallo con visible afecto.

Durante su gestión como gobernador de Veracruz entre 2004 y 2010, Herrera impulsó ambiciosos programas en infraestructura, salud y educación, como el “Proyecto Clavijero” y becas para estudios en el extranjero, con el objetivo de cerrar brechas y empoderar a las nuevas generaciones. “Fue el Gobernador del pueblo, de la gente, siempre para todos, nunca le dio la espalda aa los suyos”, dijo Carvallo, quien comenzó su carrera política como secretario particular del exmandatario.

Carvallo recordó a Herrera como un político de calle, cercano a la gente, que prefería escuchar directamente las preocupaciones ciudadanas antes que encerrarse en una oficina. “Fidel no era un político de escritorio; caminaba, escuchaba y actuaba. Su estilo directo y su energía incansable dejaron una huella imborrable en Veracruz y en quienes trabajamos a su lado. De él aprendí la lucha por las causas sociales, el trabajo permanente y su compromiso con quienes menos tienen”.

Con voz firme pero conmovida, Carvallo concluyó: “Hoy despedimos a un líder que supo transformar la política con inteligencia y pasión. Su legado nos inspira a seguir trabajando por un México más justo y solidario”.

Fidel Herrera Beltrán, también conocido como “El Tío Fide”, será recordado no solo por su vibrante oratoria y estilo carismático, sino por su entrega al servicio público. Su legado vive en las políticas que transformaron Veracruz y en la generación de políticos que, como Carvallo Delfín, crecieron bajo su guía.